Más que un estadio, podríamos verlo como un templo. Un lugar sagrado donde los fans asisten para cultivar su fidelidad a los clubes.
Da igual el nivel de tecnología, infraestructura o conectividad si los fans vuelven a casa orgullosos.
Sin embargo, hay muchas sinergías que pueden ser explotadas al ya existir en el estadio o bien desarrolladas progresivamente para enriquecer la experiencia del matchday.
¿Y si estamos en el negocio del entretenimiento?
Bien, si los fans acuden para pasar un buen rato, ya sabemos en qué industria nos encontramos. Los nuevos estadios tienden a contener centros comerciales, hoteles, zonas VIP infantiles y hasta co-workings que nos llevan a pensar en todo menos en fútbol.
Por ello, los estadios son cada vez menos campos de fútbol y más activos de valor incalculable, especialmente cuando se habla de naming rights.
En el siguiente gráfico, podrás ver varias formas de rentabilizar tu estadio a la vez que tratas de ofrecer la experiencia más emocionante posible.
Desde bienes inmuebles, videojuegos, sistemas de pago sin dinero o centros deportivos.
En tus manos está decidir qué tan especial será tu templo.
Source: @JoaquinMFrutos