Cada día que pasa, el fútbol femenino se enfrenta a la necesidad de ser más respetado.
Competiciones y clubes top siguen dando pasos hacia adelante reuniendo más recursos, fans, atención mediática, partners y jugadoras de gran nivel.
Por otro lado, algunos clubes, especialmente aquellos exclusivamente femeninos, con dificultades consiguen seguir el ritmo de los grandes. También lo veremos en el próximo mundial, selecciones profesionales contra selecciones amateurs.
La élite del fútbol femenino requiere que se respeten las condiciones que exige el más alto nivel. Eso significa, estructuras profesionales en clubes y federaciones, cobertura mediática, apoyo de patrocinadores, asistencia de espectadores y un negocio sostenible.
No significa que pequeños clubes y federaciones no respeten este deporte, sino que el fútbol femenino requiere el más alto nivel de condiciones para su nivel más alto. Y aquellos que no cumplan con estos mínimos se quedarán atrás.
En mi opinión, el próximo mundial femenino debe ser un punto de inflexión para:
- Mostrar, convencer y generar respeto para que se cumplan estas exigencias por parte de todos los stakeholders
- Fomentar la presencia de más mujeres en posiciones de liderazgo y toma de decisiones
- Enseñar la deportividad, ambiente familiar y calidad a todo el mundo
Un gran show para un cambio aún más grande.
Photo credit: Sports Illustrated